Computación en la nube:
La computación en la nube ha atraído millonarias inversiones en infraestructura de última tecnología, enfocándose en alta confiabilidad, excelencia operativa, rentabilidad, sostenibilidad ambiental y experiencia en línea.
IaaS – Infraestructura como Servicio
Este modelo permite alquilar infraestructura informática, donde el costo depende de los recursos consumidos, ofreciendo escalabilidad y acceso remoto desde cualquier lugar sin necesidad de hardware específico ni descargas de software. Las empresas pueden invertir en áreas estratégicas y no preocuparse por mantenimiento y seguridad, ya que el proveedor actualiza y mantiene la infraestructura en centros de datos.
SaaS – Software como Servicio
El proveedor gestiona el mantenimiento, operatividad y soporte de software, permitiendo al cliente usarlo y acceder a los resultados remotamente. Esto facilita la mejora continua del software y la entrega rápida de actualizaciones. A diferencia del pasado, donde se compraba y mantenía software propio, el SaaS permite que empresas especializadas administren y aseguren las aplicaciones, ofreciendo ventajas en costo y valor estratégico.